“Porque Dios traerá toda
obra a juicio, juntamente con toda cosa encubierta, sea buena o sea mala" (Eclesiastés 12:14).
El
juicio de Dios es tan difundido en la Biblia como el tema de la salvación; de
hecho, las dos enseñanzas están muy entretejidas.
¿Qué es Gracia? Bíblicamente significa un regalo
inmerecido. Entonces Gracia es un
aspecto del carácter de Dios. Mejor dicho el juicio y la salvación reflejan
aspectos gemelos del carácter de Dios: su
justicia y su gracia. El juicio no se opone a la salvación por eso es
importante entenderlas.
Dios
es un Dios de justicia, y la justicia demanda juicio. Dios también es un Dios
de gracia. Cuán crucial es que comprendamos ambas verdades divinas y lo que
ellas nos revelan acerca de nuestro Dios.
Pasajes de la Biblia que
hablan del juicio: Ecl. 12:13, 14, 1 Cor.
3:13; 2 Cor. 5:10; Heb. 10:30; Mat. 16:27; Apoc. 20:12: Apoc. 22:12; Mat.
12:36, 37; 1Ped. 4:17; Apoc. 14:6, 7.
Esto debería mostrarnos que, sea como fuere que
comprendamos el juicio y entendamos la gracia, necesitamos verlos como verdades
divinas que operan juntas. Poner una en contra de la otra es entender mal el
evangelio.
EL JUICIO Y LA
GRACIA DESDE EL INICIO, EN EL EDÉN
Antes del pecado, no había necesidad de gracia
porque no había nada que perdonar. Lo mismo sucedía con el juicio: antes del pecado,
no había nada que juzgar ni que castigar. Tanto la gracia como el juicio surgen, en el contexto humano, por causa
del pecado de la humanidad. Leer Génesis 3.
Satanás tuvo éxito en traer el pecado al mundo y, con
ello, cambió todo. Pero Dios se acercó, llamando: "¿Dónde estás tú?" Esta pregunta no debe ser considerada
condenatoria; era más una invitación a ir a él, quien los amaba. Nota también
qué sucedió. Las primeras palabras de Dios en este mundo caído fueron preguntas
(ver Génesis 3:9, 11, 13). Luego, de las preguntas, lo primero que Dios hizo fue declarar su
juicio contra la serpiente. En el versículo
15, aun en medio de su juicio contra la serpiente, ¿qué dijo Dios? Lee
Génesis 3:15. Este versículo es la primera promesa del evangelio. Tan pronto
como él declara su juicio contra la serpiente, le da a la humanidad el primer
mensaje de gracia, de salvación. Y solo después de la promesa del evangelio pronuncia
sus juicios contra la mujer y el hombre. Aunque ellos habían caído, lo primero
que Dios les dio fue la esperanza y la gracia, como un telón de fondo donde se
desenvolvería el juicio. De este modo, antes del juicio, la promesa de la
gracia se da a quienes quieran aceptarla. ¿Qué esperas para ser salvo? Solo
tienes que creer en el Señor Jesucristo, y serás salvo, tú y tu casa. (Ver
Hechos16:30-31)
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